Impunemente, la nostalgia
Como un antíguo cartógrafo
que cree obstinadamente en los milagros
intento borrar una isla
de su mapa
una mínima isla
una pequeña iguana
que dormita sobre el mar.
Cada día al despertar
comienza la batalla
contra pulsos y latidos
Yo la busco
obsesionado la busco
en los profundos ríos de
la memoria
en los laberintos de mi sangre
y en los fuegos que irrumpen
abruptos y hereditarios
en las desoladas trastiendas
del instinto
La busco
obsesionado la busco
para encontrar su nido oculto
el lugar donde emerge
y bulle
y matarla impúnemente
en su escondrijo
Cierro mis ojos para no ver
gallegos
negros
y mucho menos mulatas
porque con ellos me llegan
la piña y su corona
los platanos
el tamarindo
la canchánchara y el son
y la encendida llama
de los flamboyanes
Como un orfebre, ingrávido
y minucioso
voy armando mi odio vertical
y la urdimbre perfecta
de todo el desamor
Cada día la cerco la acorralo
le tiendo trampas
de orishas y abalorios
de incienso voráz y punitivo
En el crepúsculo
ya he logrado borrar
sus contornos de espuma
sus acantilados de espanto
las aves del paraíso
las playas de impúdica belleza
sus ríos pobres y envidiosos
las montañas apenadas y sin records
la floresta inmunda de arcoiris
sus lluvias torrenciales y lujuriosas
las ciudades de encanto miserable
los balcones de guitarra
y serenata
y las calles
todas sus calles.
Cuando ya le tengo
cuando la victoria es casi
irremediable
la isla se bifurca y se escapa
en los irónicos resquicios
de la piel
en las huellas y heridas
que dejan tantos años
Se me esfuma
en el olor de la guayaba
en el fugitivo olor de
las comidas
en la eterna imagen
de la palma
en las fotos y cartas
en el límpido azul de su cielo
y su bandera
en el irídiscente
verdor de los helechos
que rompen limpiamente
la pupila
y se me va
se me escapa
se me va.
Frente al abierto desacato
de todos sentidos
nostálgicos e irreverentes
me ovillo y aullo
aullo estremecidamente
como un lobo que ha perdido
su camada
y su noche de luna llena.
Y me prometo que mañana
como un antiguo cartógrafo
que cree obstinadamente en los milagros
volveré como Sísifo
a la batalla
e intentaré nuevamente
borrar una isla de su mapa.
Asdrúbal Caner
Fratello